¿QUIÉN ERES TÚ
QUE LE REPLICAS A DIOS?
EL JUICIO ES LA PRERROGATIVA DEL ALTÍSIMO DIOS.
NOSOTROS NO SOMOS EXCUSABLES CUANDO NOS ARROGAMOS UN
DERECHO QUE, A CAUSA DE LAS DEBILIDADES DE LA CARNE, PUEDE NO SER UTILIZADO CON
PROVECHO.
NINGÚN JUSTO SE ENCUENTRA SOBRE LA TIERRA Y ES POR LO QUE
NADIE PUEDE DECIR: “ES ASÍ”.
SERÍA MEJOR SI SE DIJESE: “YO CREO QUE ESTO PODRÍA SER
ASÍ”.
“QUE LA VOLUNTAD DE DIOS SE HAGA SIEMPRE”.
Eugenio
Siragusa.
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